Si tienes un hijo en edad preescolar y todo lo relacionado con dormir se ha vuelto una pesadilla, ¡seguro te interesa leer esto!

Sus principales tácticas para no irse a dormir temprano

Los pretextos de un niño en edad preescolar: ya sabes como es el show, so 7:00pm, ya es hora de ir a dormir, pero de repente, le dieron ganas de ir al baño, luego necesita un vaso de agua, después le urge que encuentres su osito de peluche azul, después justo en el momento en que estás dispuesta a sentarte y relajarte, se aparece en la sala es porque se acaba de dar cuenta que le da miedo la obscuridad…

Todas las razones posibles para no ir a dormir en un día común y corriente son sus pretextos para no acostarse temprano, y por supuesto situaciones tentadoras para iniciar una conversación y aleccionar a tu hijo de que sí y que no se debe hacer, como debería avisar para ir al baño mucho antes de ir a dormir y recordarle la importancia de porque no debe de tomar tanta agua antes de dormir…uy por supuesto el regaño por no saber donde dejó su oso azul favorito. ¡No! Le recuerdas y lo terminas de educar en la mañana, no permitas que las excusas para atrasar la hora de ir a dormir se alarguen más. Mientras menos atención le pongas a sus pretextos, más rápido irá a descansar. Cuando se lidia con un niño en edad preescolar, ¡piensa menos, no más!

Dejó la siesta demasiado pronto

Arriba del 80% de los niños, cerca de los 3 años de edad, todavía necesitan una siesta. Es al edad en la que a penas la empiezan a dejar, y aún así necesitan sus 12 ó 13 horas y dentro de esas, puede estar o no la siesta.

Si tu pequeño de 2 años de repente quiere dejar la siesta, observa que está pasando en su vida en este momento. Checa nuestro blog con los 5 tips para que tu hijo tenga buenas siestas.

¿De repente su vida se volvió caótica? ¿Hay un nuevo hermano en la escena? ¿Un nuevo parque o lugar para ir a jugar? ¿Se te empezó a hacer pesado el hacer su ritual habitual para las siestas? ¿Están llegando a casa tarde para la siesta 4 de cada 5 días y estás apurando a tu pequeño de 2 años para que tome su siesta?

Asegúrate que tú no estés tarde para sus siestas el 80% de las veces. Un niño de 2 años, puede desarrollar fácilmente MAPA (miedo a perderse de algo) y por lo tanto estar agotado y resistirse a las siestas para mejor hacer una torre de bloques.

En caso de que haya un nuevo bebé en casa, el ritual para dormir se puede volver algo truculento, pero justo como no necesitas sacar a tu hijo grande del cuarto en cuanto vayas a dormir a tu bebé, no tienes que sacar a tu bebé cuando vas a dormir a tu hijo grande. Si las siestas no están sincronizadas, sólo trae a tu bebé al cuarto donde tu hijo grande toma la siesta; léele un cuento, si tu bebé necesita comer, le puedes pedir a su hermanito que el cambie las hojas del cuento, ¡haz un sonido divertido cuando le toque cambiar de página! Dile a tu hijo, que el nuevo bebé también ser irá a dormir, en el momento en que el se duerma, así no habrá celos de que uno pase más tiempo cerca de mamá. Si tu niño de 2 años ya dejó la siesta y estás experimentando intensamente los “terribles 2”, es muy probable que esté demasiado cansado y eso esté contribuyendo a que tenga ese comportamiento. Las siestas le pueden dar nuevamente estabilidad emocional, que muchas veces pierden igual que las siestas. Muchos problemas de sueño en niños de preescolar pueden regresar en cuanto dejan la siesta, debido al agotamiento.
Cambio a cama demasiado pronto Muchos problemas de sueño en niños de edad preescolar aparecen en cuanto se mudan a una cama de niño grande demasiado pronto. Si tu hijo no muestra intentos de brincarse de la cuna, entonces puede dormir ahí el tiempo que tú quieras; es muy común ver a papás apresurándose a hacer esa transición a cama de niño grande, como una divertida faceta o porque viene un nuevo bebé y necesitan la cuna. Si tu hijo no es tan bueno durmiendo en la noche, hay muchas probabilidades de que cambiándolo a una cama de niño grande haga que el problema se MAYOR. Muchos niños duermen felices en sus cunas hasta cerca de los 3 años, si tu hijo está feliz, no lo apresures a hacer el cambio y su sueño seguirá seguro. Conoce los 10 pasos para hacer el cambio de cuna a cama.

Se volvió madrugador

Si tu hijo está despertando a las 5:00am y escabulléndose a tu cuarto despertando a todos, puede ser una señal de agotamiento. Intenta llevarlo a dormir más temprano.

Otra razón es que la siesta puede ser demasiado larga, es hora de cortarla unos 15 minutos.

Revisa la dieta de tu pequeño y asegúrate que esté comiendo bien, la falta de hierro y otros minerales puede contribuir a que despierte temprano.

¡Otra muy importante! ¿Está entrando el sol de las 5:00am por su ventana? Esta es una señal muy clara para el cuerpo para producir serotonina y avisar que es hora de estar despiertos.

Si tu hijo ya tiene edad suficiente para dormir en cama, entonces tiene edad también para tener un reloj despertador entrenador. Hay relojes que le ayudan a saber de forma divertida, cuándo es tiempo de salir de cama y cuándo no.

Despertar durante la noche

Que un niño de edad preescolar siga despertando en la noche es mucho más común de lo que crees. Si tu hijo es de los que despierta a mitad de la noche por una mamila, es el momento ideal para que dejes de hacerlo, tu dentista (y tu hijo) te lo agradecerán.
Puedes remplazar la leche por agua por un par de noches o hacerlo de un “jalón” y ayudarlo a que se tranquilice y siga dormido. De nuevo, revisa su alimentación, y asegurarte que no se vaya a dormir demasiado cansado. Revisa como se esta quedando dormido en las siestas, ¿te pide leche también o se puede dormir sin tomar leche?

Buenos hábitos de sueño y reglas para dormir son sumamente importantes si quieres que tu hijo aprenda a conciliar el sueño solo o para que aprenda a quedarse dormido y a quedarse en cama toda la noche.

Sin disciplina positiva, un niño de preescolar presionara e insistirá de mil maneras para demostrar su testarudez ( o terquedad) y se volverá una lucha de poderes. ¿Quién gana en la noche?

Intenta nuestros métodos comprobados que tu hijo en edad preescolar duerma mucho mejor, toda la noche de corrido y en su cama.

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